Vivir una situación de confinamiento producto de una pandemia es algo que puede afectar el bienestar mental y emocional de muchas personas. Aquí entregamos consejos para enfrentar de la mejor manera este periodo
Iquique y Alto Hospicio, como varias otras comunas de la Región Metropolitana más Antofagasta y Mejillones, se encuentran en un periodo de cuarentena producto del rápido aumento de casos positivos de Covid-19. En Tarapacá, ya van más de 1.800 casos y pese a los esfuerzos médicos para abordar esta emergencia, la situación no es alentadora.
La incertidumbre respecto del futuro y cómo lograremos sortear esta pandemia puede provocar ansiedad y episodios de angustia en muchas personas. Además, son miles las y los trabajadores que deben continuar con sus labores desde la casa, sumándose el mantenimiento del hogar y el cuidado de los niños y adolescentes a sus tareas diarias.
Por eso el psicólogo clínico, Pablo Lira, quien es asesor del Departamento de Salud de la Corporación Municipal de Desarrollo Social de Iquique entrega consejos especializados para saber cómo enfrentar la cuarentena.
Recomendaciones generales:
Lo principal es recordar que cada uno de los integrantes de la familia vive la cuarentena de manera distinta dependiendo de la edad, experiencias e historia, por lo que es fundamental empatizar y ponerse en el lugar del otro ante todo lo que está ocurriendo.
Enfrentar la situación de un día a la vez y centrarse en el presente.
Mantenerse al día sobre lo que está ocurriendo, pero limitando su exposición a los medios de comunicación. Establezca horarios y prefiera la información de los canales oficiales.
Use las herramientas tecnológicas para mantener el contacto con sus seres queridos y familiares.
Establezca rutinas estables. Ubique cuál será su lugar de descanso, cuál será su lugar de trabajo, etc. Levántese, tome una ducha, haga la cama, no se mantenga en un mismo espacio todo el tiempo.
Aproveche de hacer esas tareas que siempre quiso y que tenía pendientes por falta de tiempo.
Incluya en su rutina algún tipo de ejercicio que pueda hacer dentro del hogar.
¿Qué hacemos con los miedos de los niños?
Para aquellos padres, apoderados y tutores que están lidiando con la incertidumbre y miedos que pueden tener los niños, es necesario que recuerden que los más pequeños del hogar “interpretan el mundo a través de sus adultos, por lo que ellos entenderán lo que está pasando mediante la forma que sus cuidadores interpreten lo que está pasando. Está bien que nos sintamos preocupados, pero cuando ellos ven miedo y angustia es muy probable que se genere en ellos mayor temor que antes”, dice Lira.
Mantenga la rutina y explíqueles porqué están en la casa.
Utilice las cosas que tiene disponible en casa para generar actividades en conjunto, algunas de ellas pueden ser: Cocinar, dibujar, contarse cuentos en pares donde cada uno inventa un trozo de historia, entre otras. Dependiendo de la edad, pueden emplear herramientas tecnológicas como computador o celular.
Es necesario que se les explique lo que está ocurriendo, de acuerdo a la edad que tengan los niños, ya que son muchos los cambios a los que se están enfrentando.
Divida y distribuya los juguetes. Los niños se saturan y aburren rápidamente de juguetes, por lo que es necesario exponerlos de forma parcial a sus juguetes. Una idea puede ser dividirlos por bolsas y que en un día de juego determinado se entretenga con el contenido de la bolsa.
Manejo de los adolescentes
Los adultos que tengan a sus cargos adolescentes deben mantenerse atentos a sus cambios y preguntarles frecuentemente cómo se sienten y qué necesitan.
Propiciar, siempre cuidando, el contacto que el adolescente mantenga con sus pares.
Los adolescentes se encuentran experimentando sus emociones en el máximo de su capacidad y muchas veces por primera vez, por eso es necesario validar lo que están sintiendo y no tratarlos de exagerados.
Mantener una rutina de horario ayudará a mantener al adolescente en el presente.
¿Cómo cuidamos a nuestros adultos mayores?
Dentro de las posibilidades de cada adulto mayor, es necesario incluirlos en la distribución de las tareas del hogar, así sentirán que son un aporte al bienestar general de la familia.
Si conocemos a un adulto mayor que vive solo, tenemos que hacerles sentir que tienen una red de apoyo y una comunidad que se preocupa por ellos.
Ayudarlos con las tecnologías, para que mantengan el contacto con sus familiares y amigos.
En tanto, para aquellas personas de la tercera edad que atraviesan un periodo de depresión o de alguna otra patología ligada a la salud mental es fundamental mantener sus controles, la toma de los medicamentos y el contacto con sus terapeutas, además de compartir sus preocupaciones con seres queridos y amigos.
“Debemos recordar que nuestras respuestas son normales, frente a situaciones anormales como la que estamos viviendo, por lo que está bien que nos generen angustia, pero también debemos recordar que ellos cuentan con una gran cantidad de herramientas que han aprendido y desarrollado para hacer frente a su condición de salud, por lo que deben empelarlas para enfrentar la situación”, indica el psicólogo de Cormudesi.
¿Qué hacer para manejar una crisis de ansiedad o de angustia?
Ante una crisis de angustia lo que podemos hacer es respirar de manera profunda y abdominal, con nuestras manos cruzadas sobre el estómago. Luego debemos botar el aire por la boca de manera lenta pero constante, evitando sentirse ahogado.
Una vez que ya se controle esta respiración, se debe concentrar en los ruidos cercanos, luego los más lejanos hasta volver a centrarse solamente en la respiración.
Otro ejercicio que se puede hacer, corresponde a mantener la misma respiración que se explica en el punto anterior y comenzar a contar de manera mental y sin ayuda desde el número 500, pero descontando de a 3 números cada vez, hasta llegar a 387. Luego se comienza a descontar de a 4, hasta llegar a 200, donde se descuenta de a 7, hasta llegar a cero.